Podría haber firmado estos versos William Blake, pero el infinito es eso que acarician eternamente todos los grandes poetas. Y para eso están los poetas, para ampliarnos nuestros prosáicos horizontes.
El infinito ha sido asumido
como un repentino invitado
¿Pero cómo puede venir lo magnífico
si nunca se ha marchado?

Las traducciones, siendo un trabajo loable, no transmiten como el original:
ResponderEliminarThe Infinite a sudden Guest
has been assumed to be—
But how can that stupendous come
which never went away?
Me he aficionado a leer, siempre que puedo, las dos versiones (original/traducido). Ahora estoy con Devociones, de Mary Oliver y es otra historia. Si nos llega tan dentro la traducción, imagina el original, uf.